miércoles, 6 de abril de 2011

Comparación con el español

Las coincidencias entre el español y el hebreo antiguo son escasas, mientras que las existentes entre el español y el hebreo moderno son más numerosas. La razón de esto es que la lengua antigua tenía una exigua influencia de la lenguas origen del español, el latín y el griego, mientras que el hebreo moderno ha adoptado numerosos préstamos de ambos idiomas. Además, la adopción por el Estado de Israel de la norma de pronunciación sefardí supuso que la pronunciación moderna del hebreo sea casi igual a la de los judíos expulsados de España en 1492, y naturalmente próxima a la del español.
Entre las diferencias entre el hebreo antiguo y el español están la presencia en el primero de las consonantes guturales ʕayin y het; las consonantes enfáticas tet, tsadik y kuf (tipos de /t/, /s/ y /k/); la sibilante sin (probablemente, la misma que hay en dialectos sur-arábigos modernos) junto con samej (/s/) y sin (/s/). En el hebreo moderno, sin embargo, tales consonantes se pronuncian con sonidos exactamente iguales que en el español.
Por último, las escasas similitudes semánticas entre ambas lenguas se deben, además de a la influencia latina y griega sobre el hebreo moderno, a la influencia del árabe sobre el español, que introdujo palabras semíticas similares en algunos casos al hebreo: לימון limón (limón). Existen además préstamos directos del hebreo bíblico al español, como 'aleluya', 'amén' o 'mesías', así como gran cantidad de nombres de pila como Juan, José, María, Jesús, Ana, Manuel.

Filiación lingüística

El hebreo pertenece al grupo noroccidental de las lenguas semíticas y más concretamente al subgrupo cananeo. Este subgrupo incluye también al fenicio-púnico, al moabita y al amonita. El otro subgrupo de las lenguas semíticas noroccidentales es al que pertenece el arameo, cuyas similaridades con el hebro aún son evidentes aunque algo más distantes que con el fenicio. Muy posiblemente algunas variedades de fenicio y algunas de hebreo fueran mútuamente inteligibles en un alto grado.
Con certeza, la similitud entre el hebreo bíblico y el fenicio, y algunas palabras cananeas que aparecen en las cartas de Amarna desde el siglo XIV a. C., muestra que la lengua de los israelitas no difería mucho, después de todo, de la de los cananeos. Algunos han inferido de las comunes características del hebreo y el cananeo, y de las palabras "un arameo errante fue mi padre" (Deut. 26.5), que los antecesores de los israelitas hablaban arameo y que adoptaron de los cananeos la lengua más tarde conocida como hebreo.

Extencion del Hebreo

El hebreo es una lengua semítica de la familia afroasiática hablada por cinco millones de personas en Israel (95%) y por otros dos o tres millones en comunidades judías repartidas por el mundo, lo que da un total de ocho millones de hablantes. El hebreo es, junto con el árabe, una de las dos lenguas oficiales del país y es hablada por la mayoría de su población.